Las habilidades sociales nos ayudan a desarrollarnos como personas. Gracias a ellas podemos defender nuestros derechos de forma adecuada. En ocasiones nos encontramos con una limitación a la hora de defender algún derecho básico, por ejemplo, decir no a alguna petición que no nos apetece. Son muchas las estrategias que utilizan nuestros iguales para tratar de convencernos, y en ocasiones somos manipulados y accedemos a sus peticiones. Esto nos puede llegar a frustrar.A continuación, describo varios puntos relacionados con este asunto:
- Establecer límites es algo muy importante entre la persona y el mundo que nos rodea. Saber diferenciar estas fronteras que te separan de los demás, y saber decir no de forma clara y natural ante cualquier situación, es necesario para reconocer nuestra identidad y conocerse como individuo.
- ¡Deshazte de los miedos! Muchas personas temen que al decir no se provocan determinas consecuencias negativas para la convivencia, por ejemplo:
Discusiones: si no digo que sí, se va a enfadar conmigo.
Aislamiento: si no digo que sí, no me querrá.
Falta de confianza en uno mismo: tengo que decir que sí.
Humillaciones: si no digo que sí se reirán de mí.
Soledad: si no digo que sí me quedaré solo.
Solo son miedos irracionales que limitan el desarrollo social de la persona.
- Establecer límites es una muestra de personalidad. Dota de confianza a la persona, nos diferencia del resto y es positivo, ayudándonos a hacernos valer. Establecer límites evita relaciones y circunstancias insanas, como el abuso psicológico, el maltrato físico y la manipulación.
- Toma de decisiones y resolución de conflictos. Una persona que sabe establecer sus propios límites, atendiendo a sus deseos y prioridades, también puede verse envuelta en una situación complicada, donde su bienestar se vea perjudicado, pero solucionará sus conflictos y tomará decisiones de manera más acertada para ella misma.
- Deja de culpabilizarte. Debemos asimilar que decir no y establecer límites no es un acto negativo. Por ello no debemos sentirnos egoístas. Hay que dejar atrás el pensamiento: “¿y si no lo hago…?”.
- Atrévete a plantar cara. Hay que tener valentía para decir no y defender tu opinión ante otra persona. Confía en ti mismo.
- Establecer límites requiere comunicación. Debemos decir no de forma correcta sin ser pasivos ni agresivos, y sin mostrar miedo, expresando nuestros gustos, ideas y deseos siempre de forma correcta.
- Reflexiona antes de tomar una decisión que pueda afectar a tus límites. Es mejor negarse a hacer algo que dar precipitadamente un sí a la ligera. De esta forma ganamos tiempo para reflexionar sobre algo de lo que no estamos seguros.
- ¿Cuándo no estás respetando tus límites? Cuando una persona pierde el contacto con lo que quiere, con lo que le gusta, con lo que sustenta sus decisiones, está rompiendo sus límites y su identidad, ya que esos deseos son dominados por la voluntad de otra persona.
- Decir no es un derecho de la persona. Poseer poder de decisión, valorarse a uno mismo y velar por nuestros propios intereses, reconociendo la individualidad y rechazando aquello que no queremos, es un derecho humano universal.
José Antonio Arranz
cualquier indicacion o ayuda que reciba para mi situacion sera bienvenida
Jose Anonio,
mi esposo es un alcoholico seco, lleva 11 años sin tomar. Cuando nos conocimos en la universidad yo tenia 18 años y el 20, me confio que era alcoholico como a los 8 años de novios, y empezó a asistir a AA, yo no creia que el tuviera ese problema, ya que para mi gusto era relativamente tranquilo y como mi padre golpeo a mi madre, tal ves no me parecian actos violentos, y los que veia mal yo decia «con migo se le van a quitar».
Un problema grande que tiene es justamente el no saber decir NO, y eso en muchas ocasiones afecta nuestra relacion y vida familiar, ya que en sus trabajos, siempre esta trabajando hasta tarde (una porque no tiene un sistema de disiplina y organización, le falta concentración, y otra porque no sabe dar a respetar sus tiempos.
Algo que ya despues de 21 años ya no tolero. Y e iniciado a casi forzarlo a que debe respetar a sus hijos y a su esposa, en cuanto a dedicarnos tiempo, dedicar tiempo al arreglo de la casa, a que sus trabajos son en un horario que no nos quite tiempo a su familia. A que socialmente si hay un difunto v.g. , me de mi lugar llevandome y acompañandome a mi y sus hijos, en lugar de estar con su matriarca y manipuladora madre.
y digo forzarlo porque si no se alinea, he hablado con él y dichole que mejor se retire de la casa, esto porque ya no tolero el estar sola con toda la carga de la casa, el trabajo, los niños. Y tambien, siendo la mayor aportadora económica. Y como viene de una familia materna sumamente problematica y con adicciones al alcoholismo, me he aislado de su familia materna.
Despues de este rollo, mi pregunta es estoy callendo en ser una persona que NO RESPETA LOS LIMITES DE SU PAREJA.
Esto es el que el quiera dedicar mas tiempo al trabajo.
El que le de mas lugar a su madre y a la familia de esta.
El que apoya a su madre para que esta pueda seguir como cuando vivia su padre, ofreciendo comida como atractivo de su casa, y tener siempre a su familia de ella en su casa, y con esto aparentar un poder sobre sus hijos (entre ellos mi marido).
Otros.